En un artículo anterior te mostramos el concepto de eslingas y la importancia de su uso en el trabajo con grúas, principalmente para levantar y desplazar objetos. Asimismo, presentamos los tipos más comunes empleados en la industria de las grúas.
En esta oportunidad, Grúas Arlín abordará el tema de las eslingas de seguridad como un sistema anti caídas cuyo objetivo es proteger con eficacia a un operador contra las caídas durante trabajos en altura y cumplir con las normas actuales aplicables.
De acuerdo con la normativa internacional, un sistema anti caída debe obligatoriamente componerse de 4 elementos:
1. Punto de Anclaje:
Es el punto donde el sistema anti caída queda sujeto de manera segura. Se caracteriza por su resistencia. El tipo de anclaje será distinto según la estructura disponible y deberá elegirse según el trabajo a realizar, la selección del punto de anclaje es determinante para el usuario.
2. Elemento de Conexión:
Une al operador (a través de su arnés) al punto de anclaje, este elemento siempre deberá incluir un elemento de disipación de energía que garantice la detección de la caída. Debe cumplir la función de retener al trabajador en caso de caída y amortiguar.
3. Arnés de protección o anti caída:
Se trata de un correaje que, en caso de caída, evita que se produzcan lesiones físicas. Su diseño debe garantizar un reparto homogéneo de las fuerzas por todo el cuerpo con el fin de eliminar cualquier riesgo de lesiones como consecuencia de una caída.
El arnés anti caída también puede incorporar un dispositivo de mantenimiento durante el trabajo (cinturón y correa de posicionamiento) que permita trabajar con las manos libres.
4. Procedimiento de rescate:
Antes de utilizar cualquier sistema anti caída deben tomarse las disposiciones necesarias en cuanto a la puesta en marcha de un posible rescate.
Verificación periódica del sistema anti caída
Los equipos de protección individual (EPI) contra caídas de altura, estén en servicio o en almacén, deben ser siempre objeto, al menos anualmente, de verificación antes de su utilización.
El objetivo de la verificación periódica es el de:
- Garantizar el buen estado de los equipos de protección individual para descubrir, antes de utilizarlos, cualquier defecto que pudiera alterar el nivel de seguridad o de protección necesario, o que pueda originar situaciones peligrosas para los usuarios. Esta verificación concierne en particular al estado general de las costuras y a los modos de fijación de los sistemas de protección individual contra las caídas de altura.
- Asegurarse de que cada equipo de protección individual esté acompañado de unas instrucciones de uso redactadas en el idioma del país, de manera precisa y entendible.
- Tomar las medidas necesarias para que en el momento de expiración de la vida útil estos sean eliminados a tiempo y no se vuelvan a utilizar.
- Asegurarse de que se respetan las instrucciones relativas al almacenamiento y mantenimiento del EPI, según las recomendaciones del fabricante.
Sabías que…
El intervalo entre verificaciones puede reducirse dependiendo de las condiciones de almacenamiento o del entorno, del modo de funcionamiento o del diseño de ciertos componentes sometidos a exigencias extremas que pudieran dañar su función protectora.
Las verificaciones deben ser realizadas por personas competentes y especializadas en su mantenimiento, pertenezcan o no a la empresa.
Conclusiones
Al trabajar con eslingas es muy indispensable considerar un adecuado mantenimiento de los 4 elementos claves de este componente: el punto de anclaje, los elementos de conexión, el arnés de protección o anti caída y los pasos para el procedimiento de rescate. Su correcto estado marcará la diferencia entre la vida y la muerte de un operador ante un posible accidente de trabajo.
Vale recordar que el mantenimiento la debe efectuar un especialista y el proceso debe ser minucioso y técnicamente correcto.
Comentarios Recientes