La empresa adjudicataria de la grúa municipal, la UTE Grúa Puerto de Santa María, comunicó al Ayuntamiento que interrumpirá el servicio el próximo ocho de noviembre ante la deuda de más de 340.000 euros.

Y es que según la UTE ya han pasado cuatro meses desde que el Consistorio debió abonar las facturas pendientes.

Por su parte, el grupo municipal de Izquierda Unida, que hizo público el escrito preguntó dónde el destino del dinero que pagan los propietarios de vehículos multados. «Se supone que ese dinero está destinado a pagar el servicio».

La portavoz, Pepa Conde, indicó que los ciudadanos pagan más de ochenta euros por retirar su vehículo del depósito mientras que el Ayuntamiento paga a la empresa casi trece euros por vehículo retirado.

«Teniendo en cuenta que la media de vehículos retirados en el último año es de 534 vehículos al mes, esto supone que los ingresos obtenidos superan las facturas que debe pagarse a la empresa, por lo que no entendemos que a la fecha en la que estamos no se haya satisfecho ni un solo euro a la empresa desde que comenzara la nueva adjudicación», agregó.